Entre las personas que consumen drogas ¿quién debe de ser tratado?

Entre las personas que consumen drogas ¿quién debe de ser tratado? Entre las personas que consumen drogas, ¿quién debe ser tratado? ¿Y en qué consiste el tratamiento? Decimos que una persona es drogodependiente cuando no es capaz de dejar el consumo de cierta droga, porque su cuerpo está acostumbrado a la sustancia y su ausencia provoca síntomas físicos (síndrome de abstinencia) y/o porque se ha habituado a vivir bajo los efectos de la droga, siendo un deseo irrefrenable de consumirla con frecuencia (cravin). En este caso, el tratamiento se vuelve imprescindible para que la persona pueda recuperar el control de su vida. Sin embargo, no es necesario esperar a situaciones tan graves para solicitar orientación respecto al consumo de drogas. En ocasiones, la información y soporte que una persona o su familia recibe en un centro terapéutico puede servir para abordar otro tipo de situaciones de consumo, como en el caso de adolescentes con consumos habituales en los que están presentes otros factores de riesgo (problemas emocionales o psicológicos, conflictos familiares, ausencia de vínculos con adultos de referencia...). El tipo del tratamiento indicado dependerá del grado del desarrollo de la problemática con el consumo de drogas presentado por el paciente. Existen diferentes grados, que están relacionados con los daños causados por el consumo de drogas y que llegan hasta la presencia de comportamientos adictivos graves. Una problemática con el consumo de drogas no está necesariamente relacionada con la frecuencia del consumo, como suelen pensar los legos en la materia. Un consumidor esporádico de drogas podría presentar graves consecuencias dañinas cuando consume. Por ejemplo, una persona puede consumir alcohol u otro tipo de drogas solamente un fin de semana cada dos meses pero, cuando lo hace, consume sin límites causando serios problemas, tales como accidentes de tráfico, problemas con la policía, peleas, comportamiento vergonzoso, gastos económicos exagerados, pasar el fin de semana consumiendo, tener relaciones sexuales desprotegidas y adquirir enfermedades de transmisión sexual, etc. Otra característica que indica la necesidad de un tratamiento es el cambio de comportamiento de la persona que está consumiendo drogas: cambio de círculo social, pérdida de actividades sociales, bajada en el rendimiento laboral o en los estudios... El tipo de consumo que realiza la persona también puede apuntar a la necesidad de tratamiento y de solicitud de auxilio. Si el consumo es únicamente recreativo, esporádico, limitado y sin consecuencias prejudiciales es muy probable que NO se necesite un tratamiento; pero cuando el consumo de drogas se realiza para "auxiliar", "ayudar", "apoyar" a la persona en determinadas situaciones o comportamientos, ésta puede ser la señal de una dificultad de la persona, dificultad que está siendo tapada con el consumo. Por ejemplo: Cuando alguien bebe o consume alguna otra sustancia para desinhibirse en la discoteca y así poder bailar y/o ligar, está persona podría estar desarrollando una dependencia a algunas sustancias. Esto ocurre porque está haciendo de la droga una "muleta" para alcanzar otros objetivos. En mi experiencia clínica, es muy común encontrar adictos adultos con un serio problema de drogodependencia que empezaron a consumir drogas de manera habitual debido a un rasgo de timidez, y que, en lugar de afrontarla,la tapaban con el consumo, que poco a poco fue en aumento. De esta manera, la persona no sólo no aprendió a desarrollar mecanismos psicológicos para superar su timidez, sino que además se encontró ante un factor de riesgo para el desarrollo de la adicción. En estos casos, el tratamiento pasa no sólo por el proceso de deshabituación de las drogas (abstinencia) sino también por el desarrollo de una personalidad más segura. Es importante tener presente lo siguiente: "¡LA PROBLEMÁTICA DEL ABUSO DE DROGAS ES UN SINTOMA!" Así como la fiebre es un síntoma de que algo no va bien en el organismo de la persona, el abuso de drogas también es un síntoma de que algo, a nivel emocional, no va bien. Al igual que se debe tratar la fiebre, bajándola, y buscar su causa (por ejemplo, una infección), debemos tratar de disminuir o parar el consumo de sustancias y diagnosticar la causa del desarrollo del abuso de drogas, que en la mayoría de los casos suele ser de base emocional. Es importante comprender que las drogas son poderosos anestésicos emocionales y también orgánicos. El opio, sustancia base de la heroína, es uno de los mayores anestésicos conocidos por la ciencia. La cocaína y el alcohol también son anestésicos. Las personas que consumen drogas de manera habitual desarrollan, sin ser conscientes de ello, un aparato mental débil frente al dolor emociona. Es común que una persona adicta o consumidora habitual de drogas, ante cualquier dificultad, sienta la necesidad de consumir para aliviar el peso o el dolor que le genera. Este comportamiento impiede que la afronte los problemas de manera correcta. Teniendo en cuenta esta perspectiva, los tratamientos modernos para el abuso de drogas intervienen en diferentes frentes en el proceso de curación o recuperación. Antiguamente se abordaba el tratamiento únicamente de manera conductual, buscando que el individuo dejase de consumir y nada más. Se creía que el problema era solamente del consumo, es decir, orgánico, por lo que se consideraba que el individuo se curaría si se conseguía un período de abstinencia. Estos procedimientos fracasaron. Millares de personas que padecían adicción pasaron por estos procesos y consiguieron mantenerse abstinentes por un corto espacio de tiempo, volviendo después a consumir. Las investigaciones científicas mostraron que este camino era insuficiente, pues en el desarrollo de la dependencia intervienen más factores que los relativos a la propia sustancia, y que son los que hacen que la persona vuelva a "necesitar" consumir. Los tratamientos actuales abordan estos factores, algunos de los cuales señalamos a continuación: - La necesidad de desarrollar una fortaleza mental y emocional frente a la frustración. - Desarrollar una personalidad madura - Desarrollar más autoconfianza, autoestima, seguridad... - Volver a confiar en las personas que están alrededor y en la sociedad - Cambiar la relación que se tiene con la vida - Crear nuevas amistades, nuevos entornos sociales, aficiones sanas ... - Y un largo etc. Con esto, quiero informarte de que el tratamiento para el abuso de drogas, adicción y drogodependencia aborda diferentes situaciones y fases. Dejar de consumir, por sí solo, no da los resultados esperados, sino que el proceso es bastante más extenso. Los tipos de tratamientos varían en función de la gravedad de la problemática del consumo de drogas y en todos ellos hay diferente fases. Antes de continuar con la explicación sobre el tratamiento, es importante destacar que en éste no sólo está implicado el usuario de drogas, sino también la familia, como un todo. En el problema de drogas, toxicomanía y adicción, se considera que la familia también está enferma. Incluso, en muchos casos, es común que el adicto no acepte tener o estar pasando por un problema y que por lo tanto no quiera entrar en un proceso de tratamiento.En estos casos, se recomienda que la familia busque ayuda especializada. Para saber más sobre el tratamiento familiar, haga clic aquí. Preste atención a esto: NO ES NECESARIO QUE EL CONSUMIDOR DE DROGAS VENGA PRIMERO A PEDIR AUXILIO. LA FAMILIA PUEDE Y DEBE BUSCAR AYUDA. DE ÉSTA MANERA, RECIBIRÁ ORIENTACIÓN PARA SOLUCIONAR EL SERIO PROBLEMA QUE ESTÁ VIVIENDO. Respecto al usuario,el tratamiento, como decía, depende de la fase del consumo y de los problemas que presenta la persona. Estas fases son: - Una fase inicial donde el usuario empieza a presentar problemas. En este caso, el tratamiento es sólo ambulatorio y a veces se resuelve con unas pocas visitas a un psicólogo o técnico especializado, en las que también participa la familia - Si la problemática está más avanzada y el consumidor está presentando problemas más severos, como disminución o cambios de su círculo de amigos y actividades sociales, consumos frecuentes, cambios de humor, irritabilidad, euforia exagerada y sin motivo, depresión,pérdida del rendimiento laboral o escolar..., el tratamiento también puede ser ambulatorio, pero llevará más tiempo, será más difícil y es posible que se necesite en alguna etapa del tratamiento la intervención farmacológica. El tratamiento abordará 3 vertientes: psicológica, educativa/comportamental (donde se trabajará el cambio de entorno de amistades) y biológica (donde se intervendrá farmacológicamente para favorecer una estabilidad del humor (emocional) del paciente). La parte medica podrá ser necesaria o no. Es difícil que en estos casos sean necesarios periodos de ingreso en un centro de desintoxicación o en una comunidad terapéutica. - Dependencia: cuando el cuadro clínico es de dependencia, el tipo de tratamiento variará de acuerdo al grado de la dependencia y también de la respuesta del paciente al tratamiento. Para saber mejor lo que es la dependencia, clic aquí. El tratamiento en los casos de dependencia química , que es cuando la persona desarrolla la adicción o toxicomanía, puede ser tanto ambulatorio como de internación. Yo recomiendo que en primer lugar se intente un tratamiento ambulatorio. Ambulatorio hace referencia a un tratamiento de visitas a un psicólogo clínico o a un centro de drogodependencia. En el caso de un cuadro de adicción, el tratamiento será largo, pudiendo tardar de uno a dos años, y es un proceso difícil y doloroso para la familia. En estos casos el apoyo y la presencia de los familiares en el tratamiento significan mucho para el paciente, y se ha comprobado que los mejores resultados de cura se dan cuando la familia también participa del proceso. - Ingreso en centros de desintoxicación: en primer lugar, un proceso de desintoxicación no supone la cura de una adicción, sino que es una pequeña etapa en el tratamiento. La desintoxicación se recomienda en los casos en que el paciente presenta cuadros severos de abstinencia, que le llevan a reincidir en el consumo de la sustancia para aliviar los síntomas físicos y psicológicos que genera la ausencia de la misma en el organismo. Atención: ¡la desintoxicación no cura! Únicamente alivia al paciente y abre una ventana para que el se trate a nivel psicológico y, en este caso, también médico. - Ingreso en comunidad terapéutica: IMPORTANTE: el ingreso en una CT ocurre cuando ya se han intentado todas las fases anteriores o cuando el paciente adicto presenta un cuadro grave, en el que no consigue interrumpir el consumo, o cuando sus consumos representan un riesgo para él o para las persona que le rodean. El ingreso en comunidad terapéutica varía en tiempo y en objetivos. Para saber más, lea el apartado "comunidades terapéuticas" clicando aquí. Importante:En mi caso, trabajo tanto en la fase ambulatoria como en la fase de internamiento. Los tratamientos ambulatorios son en Barcelona o en Gavà. En una primera fase, se hace un psicodiagnóstico del problema y se consensua un plan de tratamiento. En muchos casos, el consumidor de drogas no quiere venir a la visita. Recomiendo a los familiares que vengan ellos mismos para poder recibir apoyo, orientación y tratamiento. Los problemas derivados del consumo, esporádico o no, del paciente, hacen que la familia pase por una etapa difícil y dolorosa. Intervenir con los familiares en esta primera etapa suele ser muy productivo, y es aquí donde se planta la semilla de la cura futura. Si usted o su familiar tienen problemas con el consumo de drogas, recuerde que existe tratamiento y solución. Para obtener más información sobre lugares donde solicitar información o ayuda, o para concertar una visita con nosotros, puede hacer clic aquí.

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